21.4.12

LA MARCHA ATRÁS

El gobierno presume cada día de la cantidad de iniciativas -es decir,estrategias, leyes, decretos- que está llevando a cabo en sólo cien días. Pero es que la cosa es muy fácil. Sólo han tenido que meter la marcha atrás. No es que estemos de lleno en una crisis, sino en una regresión como nunca hemos visto. Es como un golpe de estado, pero utilizando mecanismos pseudodemocráticos. Y digo 'pseudo' porque lo único que están haciendo es una devastación,un 'sprint' de acoso y derribo de todo lo que hemos ido construyendo en treinta años de democracia. ¿La estrategia? Muy fácil: meter la reversa y salir disparados marcha atrás. Veamos: Despido libre y flexibilización en todo lo relativo al trabajo, más horas de trabajo por menos sueldo, reraso de la jubilación, liquidación de la sanidad y la educación universal y gratuita, recortes dramáticos en investigación, desactivación de los sindicatos, vuelta a los tres supuestos del aborto con mayores controles, es decir, aborto clandestino; favoritismo para la escuela privada, o sea, religiosa,penalización al derecho de manifestación,liquidación -de hecho- de las autonomías, amnistía a los defraudadores, control de la televisión y radio públicas.... Eso sí, a la Iglesia Católica ni tocar. Siguen con sus prebendas y sus exenciones fiscales. Son los mimados del régimen junto a los bancos, a los que se van a inyectar 50.000 millones de euros más.¿No quedamos en que no había dinero? ¿A dónde vamos? A donde estábamos. El modelo de sociedad está muy claro, pues ya lo hemos vivido: Estado nacional-católico, sindicatos verticales, prohibición de reunón y manifestación, ley de vagos y maleantes, condena del adulterio, educación elitista, sanidad para el que se lo pueda pagar... Tal vez el divorcio lo mantengan porque ellos son los primeros beneficiados. Y también el sistema de partidos políticos para simular legitimación. Entre col y col lechuga. Alternan reformas de carácter económico con leyes que restringen nuestros derechos ciudadanos. ¿Qué tendrán que ver éstas con la crisis? Pero no, no es la crisis: es el modelo. Repito,¿a dónde vamos? A donde estábamos. Lo advierto por si alguien quiere ir haciendo las maletas.

15.4.12

NUESTRO TITANIC

La verdad es que escuchando y leyendo efemérides sobre el Titanic, una se pregunta si es que cada cien años toca tragedia, aunque lo peculiar es que los dramones nos tocan ahora a los de primera y segunda clase, porque los de tercera hace muchos años, décadas y siglos que no salen de ellos.
En lo que todos coinciden es en señalar que el hundimiento se debió fundamentalmente a errores humanos, falta de visión y empecinamiento. Por supuesto que había icebergs y era época de deshielo, pero eso ya se sabía. Sin embargo, el capitán se negó a disminuir la velocidad de crucero: presiones comerciales y soberbia personal para batir un récord de velocidad. No hemos cambiado, desde luego.
El Titanic europeo se va a pique. Los de primera siguen bailando en suntuosos salones; los de segunda jugamos una eterna partida de ajedrez moviendo fichas al tuntún y mirando de reojo al árbitro a ver qué cara pone.
Es curioso que el capitán Smith diera las órdenes técnicas, pero en realidad coaccionado por el presidente de la compañía, Bruce Ismay, que se negó a que se redujera la velocidad de 22 a 20 nudos: intereses comerciales. ¿No es evidentemente similar a lo que está sucediendo ahora mismo? Los oficiales y telegrafistas reciben órdenes del capitán, pero éste las recibe del empresario, es decir, de los mercados. Tanto el capitán, en este caso Frau Merkel, y los oficiales -todos los demás- no son más que unos 'mandaos'. Nadie toma decisiones radicales y valientes en un momento verdaderamente peligroso.
Esa misma noche, Smith había cenado con un grupo de millonarios en el comedor de primera. Algunos de ellos habían financiado la construcción del Titanic, aunque el principal socio capitalista era J.P. Morgan, el famoso banquero. Él, a su vez, era a quien servía Ismay.
Uno de los fallos garrafales fue ahorrar en ciertas escotillas fundamentales para que no entrara el agua o en el número de lanchas salvavidas, aunque no se ahorró en gastos suntuosos, como escaleras versallescas, squahs, piscina, baño turco, orquesta y servicio desmesurado para los millonarios pasajeros que lucían sus galas y sofisticados gustos a todas horas. Cada pasaje de estos últimos costaba un equivalente a lo que hoy serían unos 11.000€ y entonces, como ahora, había quien pensaba que el dinero lo compra todo y merece lo mejor. Cuando se dio la orden de desembarco, muchos de los pasajeros que ocupaban los camarotes más confortables se negaron a abandonar el calorcito de sus nidos dorados para salir a las frías aguas del Atlántico Norte. A ellos no les podía pasar eso. Es lo mismo que cuando se decía que Golman Sachs o Lehman Brothers eran muy grandes para quebrar o que España sería muy cara para poder ser rescatada..... ¡Ja!
Estoy manifestando una metáfora muy evidente pero posible. Ya Nietzsche nos habló a través de Zaratustra del Eterno Retorno, es decir, que cuando se repiten circunstancias similares en la historia también se vuelven a repetir las decisiones y los valores con los que se enfrentaron los problemas. En el Titanic, como en el mundo globalizado, estaban representadas las tres clases sociales, diversas naciones, gentes de todas las edades y de ambos sexos. Ahora, igual que entonces, nadie sabe quién se salvará y quien se hundirá con el smoking puesto. También ahora como entonces en los momentos extremos se pusieron de relieve lo mejor y lo peor de la humanidad. Sin duda que hoy lo mejor son aquellos que se unen para avisar del peligro, para denunciar la locura de unas políticas que nos llevan al desastre: a todos.
Es muy triste que en nuestro país, como en otros, los gobiernos estén adoptando la actitud del empollón de la clase, haciendo los deberes los primeros para que la “seño” les ponga una medalla, que les sabrá a hiel cuando todo esto termine.
Del capitán Smith no se supo nada más y ni siquiera se encontró su cuerpo. Ismay fue de los primeros que saltó a los botes y luego desapareció del mundo, recluido lejos de todo sin poder soportar su vergüenza. Los músicos de la orquesta murieron todos, que hasta el final estuvieron tocando, rematando con un motete religioso que cantábamos en las misas del colegio (los de mi generación): “Cerca de ti, Señor, quiero morar...”
Pues eso. Que Dios nos coja confesados y cantando el “tantum ergo”.

7.4.12

COSAS NUEVAS

Uno de los pensamientos que más se citan de Einstein es aquel de que si haciendo determinadas cosas obtenemos siempre los mismos resultados, habremos de cambiar de comportamiento para conseguir lo que pretendemos. Ahora nos está pasando precisamente eso. Por mucho que la gente se haya concentrado en las plazas, hayamos acudido masivamente a la huelga, a las manifestaciones, a los deshaucios y a todo tipo de conferencias y asambleas.... nada. Nada. Ningún cambio significativo política o económicamente hablando. Lo que más me impresiona es el descaro con que nos siguen mintiendo.

¿Cuál es la gran mentira? Muy evidente: presentarnos la economía sujeta a leyes tan exactas como si fueran leyes de la naturaleza. Hablan de los recortes o de la reforma laboral como quien asegura que la tierra gira alrededor del sol. Nadie puede discutir semejantes evidencias: 'No tenemos otra salida', 'es el único camino
que nos hará salir de la crisis', mientras es evidente que sólo sirven para emprobrecer al país y a las personas, pero ¡ESO ES LO QUE QUIEREN! Esa es la conspiración que llevan a cabo la clase política, los altos organismos y el mundo de las finanzas.

Para cambiar de táctica hay que empezar a hacer 'pupa', por ejemplo a los bancos, porque el puro pacifismo no consigue nada. No se trata de ir todos un mismo día a sacar nuestro dinero del banco, ya que montaríamos un 'corralito'. Es más fácil: abren una cuenta en otro banco -a poder ser en una banca ética- y desde ahí el nuevo banco hace un traspaso desde la antigua cuenta a la actual. Y listo, porque, en realidad, no se trata más que de apuntes bancarios. Y así vamos dejando a los bancos sin clientes. Y ellos sin nosotros no son nadie. ¿Otra ingenuidad? Para nada. Es que las cosas son así de simples, que las quieren hacer complicadas para que nos traguemos el sapo. Si seguimos haciendo lo mismo, tendremos los mismos resultados. ¿Piensan acaso que Grecia o Portugal van por el buen camino? Pues eso mismo nos espera si continuamos con las mismas estrategias. Dentro de poco no podremos ni siquiera reaccionar.

Me reservo para otros días. Existen miles de posibilidades: la cuestión es hacerlas.

2.4.12

SE EQUIVOCÓ LA GAVIOTA...

… se equivocaba. Por ir al Norte fue al Sur.... Pues sí, la gaviota de Génova está bastante ennortada y ha puesto rumbo a Deutchland en lugar de hacerlo hacia Iceland, donde se han sacudido la crisis tomando medidas valientes por lógicas. Lo que estamos haciendo el resto de los europeos no es más que un disparate detrás del otro. Y es que el miedo es muy mal consejero. ¿Ustedes creen que si nos negamos a pagar las deudas de los bancos nos va a pasar algo funesto e irreversible? Pues no: todo lo contrario. Si un banco quiebra, se nacionaliza y punto, pero no se le da un euro más. Y al tipo que ha permitido que el banco quebrara por su mala gestión y su avaricia, se le juzga y se acabó. Es lo que están haciendo en Islandia.

Ya oigo las risitas, ¡qué ingenua! Que no es ingenuidad, que es pura lógica. Una lógica diáfana y esplendorosa frente a los absurdos que estamos realizando cada día obedeciendo a Alemania y guiándonos por las agencia de 'descalificación', que se están poniendo las botas con nuestras desgracias. Que en cuanto los estados comiencen a desobedecer, esto se arregla. Pero ¿quién le pone el cascabel al gato? Ya no hay valientes, ya nadie se atreve a vivir peligrosamente. Creo que los mandatarios y toda la 'corte de los milagros' de la poliquetería sólo se preocupan por consolidar sus carguitos. Tienen miedo, mucho miedo porque sin ellos no son nada.

No quiero hacer profecías, pero es que lo estoy viendo. Esto termina como la Revolución Francesa. El Primer y Segundo Estado van a desaparecer. Es decir, banqueros, grandes empresarios y clase política van a ser barridos por la Historia. Un mundo en el que imperan sus lógicas es absolutamente inviable, insostenible. Creo que el instinto de supervivencia y la potencia evolutiva de la especie van a realizar el gran cambio que ni siquiera vislumbramos.

Ahora sólo nos queda prepararnos en profundidad para estar a la altura de estos tiempos definitivos. Entramos en un período constituyente del mundo nuevo que tendremos que ir armando entre todas y todos. Esta vez nadie va a poner en cuestión a 'la mujer y la ciudadana', como sucedió en 1789. Esta vez, no. Es más, tomaremos la iniciativa.